En regiones volcánicas como México, es común escuchar que “cuando un volcán se activa, provoca temblores”. Esta creencia popular ha pasado de generación en generación, especialmente en comunidades cercanas a colosos como el Popocatépetl. Sin embargo, aunque tiene un pequeño fundamento, la relación entre volcanes y sismos es mucho más compleja y, en la mayoría de los casos, el mito es exagerado o malinterpretado.
Este mito se basa en una observación real: cuando un volcán está activo, suele haber pequeños sismos a su alrededor. Estos movimientos, conocidos como sismos volcánicos, se producen por el ascenso del magma, que fractura las rocas internas del volcán mientras intenta salir a la superficie.
En zonas como el Eje Neovolcánico de México, es común que los habitantes asocien cualquier sismo con la actividad del Popocatépetl, por ejemplo. Sin embargo, esto no significa que los volcanes “provoquen” los grandes sismos que sacuden al país.
Existen dos tipos principales de sismos:
Sismos volcánicos: Son de baja magnitud (generalmente menores a 4.0) y están localizados en las inmediaciones de un volcán activo. Son causados por el movimiento del magma o gases dentro del sistema volcánico.
Sismos tectónicos: Son los más comunes y potentes. Ocurren por el movimiento de las placas tectónicas en zonas de subducción o fallas geológicas. En México, los más fuertes suelen originarse en la costa del Pacífico, lejos de zonas volcánicas.
Los grandes terremotos no tienen relación directa con volcanes, sino con el choque de placas como la de Cocos y la de Norteamérica. Un volcán activo como el Popocatépetl puede causar sismos locales, pero no va a desencadenar un terremoto de magnitud 7 o más. En cambio, la actividad sísmica fuerte proviene de zonas tectónicas bien identificadas, como las costas de Guerrero, Oaxaca o Michoacán.
El monitoreo volcánico y sísmico en México lo realiza el CENAPRED (Centro Nacional de Prevención de Desastres) y el Servicio Sismológico Nacional (SSN), quienes publican informes frecuentes y confiables para la población.
Ante esta desinformación ¿qué podríamos hacer?:
- Informarnos sobre la diferencia entre sismos y erupciones.
- Seguir las recomendaciones de Protección Civil.
- No difundir rumores ni mensajes alarmistas en redes sociales.
Fuentes:
https://seguridad.sspc.gob.mx/contenido/1674/cenapred-registra-dos-sismos-volcanotectonicos
https://www.sgm.gob.mx/Web/MuseoVirtual/Riesgos-geologicos/Sismologia-de-Mexico
https://www.sgm.gob.mx/Web/MuseoVirtual/Riesgos-geologicos/Causas-caracteristicas-e-impactos



