El análisis del comportamiento del suelo y las pruebas dejadas por anteriores seísmos pueden contribuir a predecir a bajo coste la incidencia de terremotos en los países en desarrollo que carecen de sistemas de vigilancia sísmica, según un estudio divulgado hoy.
“Los registros de las rocas pueden ser utilizadas no solo para investigar la frecuencia de los eventos pasados, sino para proveer una importante percepción de cómo el suelo se comportará en ciertas áreas en choques sísmicos”, dijo Hannah Hilbert-Wolf, jefe de la investigación de la Universidad James Cook.