Giuseppe Mercalli nació el 21 de mayo de 1850 en Milán. Se ordenó sacerdote en 1872.
Enamorado desde niño de la naturaleza, estudió ciencias naturales como discípulo de un afamado geólogo y paleontólogo, el abad Antonio Stoppani, graduándose con sobresaliente cum laude en 1874. Estimulado por su maestro (que había destacado en ese campo) Giuseppe comenzó su carrera estudiando los glaciares alpinos, mientras enseñaba ciencias naturales en el seminario de Monza, cerca de Milán, donde él mismo había estudiado. En 1880, ganó una plaza pública de maestro en el pueblo de Domo D´Ossola, en los Alpes, donde podía continuar su trabajo más cómodamente.
Comienzo de su carrera como sismólogo
El 28 de julio de 1883 se produjo un terrible terremoto en la isla de Ischia, frente a la Bahía napolitana. Mercalli fue comisionado para estudiar sus efectos, y fruto de sus observaciones fue el estudio “Los terremotos de Casamicciola”, publicado en Milán en 1883. Al año siguiente estudió un nuevo sismo producido en la región de Milán, publicando “El terremoto de Lombardía” (1884). Ambos trabajos tuvieron una gran repercusión internacional, poniendo su nombre a la cabeza de los sabios expertos en estos fenómenos.
Por si fuera poco, durante aquellos años también publicó varios manuales de otras ramas de las ciencias naturales que se emplearon durante mucho tiempo en colegios y facultades: “Elementos de botánica y zoología general” (1884), “Elementos de geografía física” (1885) y “Elementos de mineralogía y geología” (1885).
En ese mismo 1885 publicó “Los volcanes y los fenómenos volcánicos en Italia” (tercer volumen de la obra conjunta “Geología de Italia” publicada por su maestro Stoppani en Milán, 1885), donde trazó un completo mapa sísmico de la península italiana y sus islas, históricamente documentado, y considerado pionero en Europa. Gracias a este trabajo, Italia se convirtió en referencia mundial en sismología durante varias décadas.
En 1887 estudió los efectos de un nuevo terremoto, en su obra “El terremoto de Lecco”.
Estudio de la vulcanología en el Vesubio
En 1888 se trasladó al sur, para impartir clases en el Real Colegio de Reggio Calabria. Poco después fue nombrado profesor de geología y mineralogía en la Universidad de Catania (Sicilia). A partir de ese momento, su investigación se orientó hacia el estudio de los volcanes.
A partir de 1892 enseñó vulcanología y mineralogía en la Universidad de Nápoles. Fue además maestro en el Liceo “Vittorio Emmanuele” de Nápoles hasta 1911.
Más publicaciones de los fenómenos sísmicos y vulcanológicos vieron la luz los siguientes años: “Los terremotos de las islas Pontinas” (1892), “El terremoto de Andalucía, 1897” (donde acudió comisionado por la Academia Pontificia dei Lincei), “Los terremotos del sur de Calabria y Messina” (1897), “Los volcanes activos de la Tierra” (Milán, 1897)
La escala sísmica de Mercalli
Mercalli ideó una escala para medir la intensidad de los terremotos, basada en la escala Rossi-Forel, y publicada en 1884. En ella, reducía los 10 grados de la original a 6.
Mercalli, siguiendo la propuesta hecha en 1902 por Adolfo Cancani (y tras su experiencia en el terrible terremoto de Mesina), subió a 12 grados la escala en 1906, para incluir los efectos más devastadores. Con respecto a escalas previas, amplió con mucho la descripción de los efectos, gracias a su gran experiencia. Los 4 primeros grados se basan esencialmente en la percepción del temblor por las personas, y el resto hasta 12 por los daños evaluables en objetos y estructuras (por ejemplo, a partir del grado 8- destructivo- se dañan todas las estructuras, excepto las construidas expresamente contra terremotos).
Es una escala subjetiva, porque evalúa la percepción humana del sismo. Sirve para recolectar información en zonas donde no existen aparatos detectores, o instrumentos de medición. Se basa en lo que sintieron las personas que vivieron el sismo, o en los daños ocasionados. Cuando se utiliza esta escala, se habla de grados de intensidad. Se basa en el efecto o daño producido en las estructuras y en la sensación percibida por la gente. Para establecer la Intensidad se recurre a la revisión de registros históricos, entrevistas a la gente, noticias de los diarios públicos y personales, etc. La Intensidad puede ser diferente en los diferentes sitios reportados para un mismo terremoto.
La escala de Mercalli se utiliza para evaluar y comparar la intensidad de los sismos o terremotos. Va desde I a XII, y describe y puntúa los terremotos más en términos de reacciones y observaciones humanas que en términos matemáticos.
La escala de Mercalli es más subjetiva, porque la intensidad aparente de un terremoto depende de la distancia al epicentro a la que se encuentra el observador.
La escala de Mercalli Modificada es la que se usa en los Estados Unidos y en otros muchos países. La modificación fue realizada en 1931 por Wood y Neumann, sigue siendo la más empleada para evaluar los efectos de los terremotos sobre la población urbana (menos eficaz en poblamiento disperso, pero muy acertada en núcleos densamente poblados).
Mercalli muy interesado en los efectos prácticos de sus investigaciones, en 1908 sostuvo una campaña que intentó que las autoridades prestaran más atención a las estructuras en aquellas zonas del país en las que los avances de la sismología habían detectado una mayor probabilidad de terremotos… con poco éxito
Últimos años
En 1906 fue el primero en tomar fotografías del Vesubio inmediatamente después de su erupción. Sobre este volcán publicó además “Noticias vesubianas (1901-1907)”, “Los volcanes activos de la Tierra” (1907) y “El despertar del Vesubio” (1913).
En 1908 estudió y publicó los resultados del terremoto de Mesina, siendo el primer científico que describió y relacionó un maremoto asociado al sismo.
En 1911 sustituyó a Vittorio Matteuci en el puesto de director del “Observatorio Vesubiano de Nápoles”, fundado en 1841. Llevó a cabo una profunda reestructuración del centro, potenciando su faceta investigadora, ampliando los estudios de campo sobre el Vesubio, e introduciendo tecnología en las observaciones, como las grabaciones sísmicas y presísmicas, amén de exigir una continua evaluación de los resultados de las pruebas de campo.
También publicó observaciones de erupciones de los volcanes de las islas eólicas, concretamente del Strómboli y del Vulcano. Estas fueron la base para la posterior clasificación del índice de explosividad volcánica, tomando además el nombre de “erupción vulcaniana” o “erupción stromboliniana” en honor de las mismas.
Murió el 20 de marzo de 1914 tras declararse un incendio en su casa de Sapienza, de Nápoles; una pequeña habitación de apenas 10 metros cuadrados que había escogido por la única razón de que desde su ventana se tenía una magnífica vista del Vesubio. Aparentemente, tras un accidente con su lámpara de parafina mientras trabajaba hasta altas horas de la noche. La policía, no obstante, sospechó en su momento que fue víctima de asesinato por un ladrón que quemó su habitación para borrar sus huellas, pues una cantidad de dinero importante desapareció de su apartamento. Tenía 64 años.
En su funeral, el elogio público le describió así: “un hombre sencillo, modesto, piadoso, gentil, cordial, magnánimo, evangélicamente justo, de gran ingenio, siempre muy estimado, tarde y mal recompensado”.
Legado
Mercalli publicó alrededor de 115 estudios, investigaciones y observaciones en revistas de investigación. Además, fue miembro de numerosas asociaciones científicas. Poco antes de morir, el rey le nombró Caballero de la Corona de Italia por sus méritos científicos.
Publicó diversos estudios sobre el fenómeno del bradicetismo (ascenso imperceptible pero rápido del suelo en las áreas volcánicas) en Nápoles, que fueron pioneros en su época.
Se le da el nombre de “síndrome de Mercalli” al llamado síndrome cinestésico inexplicable, por el cual los animales presentan una serie de reacciones fisiológicas (nauseas, excitación, temblores) antes de un terremoto.
http://www.infocatolica.com/blog/matermagistra.php/1712310956-giuseppe-mercalli
https://www.ngenespanol.com/traveler/sabias-que-un-sacerdote-creo-una-escala-de-medicion-de-sismos/